Mariano ha modelado definitivamente su gabinete. Con cincel reservado y gallego, el presidente de España lo ha hecho en una proporción de nueve a cuatro. Proporción que a la oposición socialista no le ha gustado, pues la oposición socialista es de proporciones mas de género fitty-fitty. El que suscribe, aunque le importe un carajo el gobierno resultante de Mariano, siempre ha defendido que en los lugares donde se cuecen habas deben estar los/as mejores, sean del género masculino o femenino en la proporción que resulte y no como resultado de la proporción. Las discriminaciones positivas dejan de serlo cuando se interviene exclusivamente en cuestiones de porcentaje. Pero no es ese el fundamento de este post. Su fundamento es comentar a barra de bar un par de cuestiones que me llaman poderosamente la atención. En primer lugar la menor: Mariano se carga por la vía del desdeño y del desecho el Ministerio de Cultura. Y es que ya se sabe, cuando hay que estirar el euro hasta inventar el hilo de cobre lo que sobran en primer lugar son las apuestas por la cultura y "saraos" añadidos, pues la derecha siempre considera la cultura como una pamplina. Para eso ya tenemos futbol.
La mayor es sobre el ministerio referencia en el que se supone, más van a dirigirse las miradas -y los odios-, es decir el de Economía. Se coloca al frente del mismo a un prócer del sistema inventor de la gran mentira económica y global: Luis de Guindos. El flamante ministro es otro de los que junto a Mariano y por culpa del atentado de Atocha, ha llegado con ocho años de retraso al poder. Ya por el año 2004 estaba destinado a ocupar Economía. Pero lo mas curioso de este asunto, es que Guindos, hasta ahora directivo del Instituto de Empresas (IE) y consejero de varias empresas más, se enroló como presidente en España del banco de inversión Leemans Brooders , ¿les suena?, si. Uno de los bancos de inversión guarrindonga más grandes del mundo y que como todo el mundo sabe, saltó literalmente por los aires como consecuencia de las hipotecas subprime. Acontecimiento que sin duda llevará tatuado en la frente para que las masas sacrificadas le señalen con el dedo a la hora de sufrir los tijeretazos primero, y privatizar sin clemencia ni misericordia después lo que haya que privatizar. El neoliberalismo es lo que tiene.
El hombre, además del bodrio de Leeman Broders, ha estado muy ocupado. Ha formado parte de la división financiera de Price Whaterhuse (PW) y es consejero de la eléctrica Endesa, de Udinesa (editora del periódico El Mundo que dirige Pedro J. y de Expansión entre otros), del banco Mare Nostrum y de Logista. Aunque es seguro -pues ya se sabe que el poder político es independiente de todo tipo de intereses particulares- que De Guindos tomará las decisiones que tenga que tomar en beneficio del interés general de los ciudadanos y por encima de intereses particulares en materia financiera, económica, de energía o comunicación ( no se me rían ustedes), y no se le ocurrirá tomar decisiones que beneficien ni directa ni indirectamente a ninguna de las empresas en las que el Sr. ministro es, o ha sido, miembro activo e importante en la toma de decisiones (sigan sin reírse, gracias).
Por cierto. En materia de salud también estamos salvados y aviados. La ministra de Sanidad "la pija que viaja en Jagüar tipo Gürtel" según dijo Mario Jiménez, se apellida MATO... ¡Valor amigos/as)
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