No salía de mi asombro cuando leí la noticia:"El Consejo de Administración del ente público, nombrado por partidos políticos y sindicatos, aprueba a propuesta del PP que sus miembros puedan conocer el contenido y tiempo de las noticias antes de su emisión" O lo que es lo mismo: la vuelta a las andanzas de la censura, tijera en mano, sobre las noticias que posteriormente se van a dar teniendo acceso al minutado de los telediarios.
La "mandanga" se montó de la siguiente manera: la propuesta nace del PP, a la que se suma CIU. Ambos partidos juntos siempre en las grandes ocasiones, suman en este caso 5 votos -ya se sabe, aunque los telediarios a nivel nacional no se den en catalán, el amor maternal de la plusvalía une mucho y se termina convirtiendo en sempiterno- Se abstienen PSOE, ERC y CCOO: 4 votos. Votan en contra UGT e IU con un voto cada una.
La propuesta, discusión y votación, se lleva a cabo en apenas una hora. Ello demuestra que la estrategia estaba pactada previamente. Es necesario aclarar que las abstenciones en esta votación deben de interpretarse como votos a favor de la propuesta, pues las consecuencias son las mismas. Por consiguiente señalemos con el dedo acusador a PSOE, ERC y CCOO tanto como a PP y CIU eximiendo de la pena a UGT e IU pues votaron claramente en contra. Es necesario indicar también que algunos de los consejeros están en funciones desde 2010.
El escándalo ha cruzado las tinieblas donde se gestan las golferías políticas para ver la luz gracias a Internet. Twitter está que echa humo. Todo el mundo está horrorizado ante la posibilidad de poner fronteras a la libertad de expresión en un medio público que pagamos todos. Una muestra más del ataque brutal y generalizado que se está llevando a cabo contra la democracia en los últimos tiempos. El derecho a la información es patrimonio exclusivo de los ciudadanos y no de los políticos ni de las empresas de comunicación. Tanto es así que los profesionales de la casa, a través del Consejo de Informativos, han elaborado un comunicado denunciando el hecho: (Comunicado) . Por otro lado la Asociación de la Prensa estudia acciones legales contra el acuerdo y los consejeros que votaron a favor o se abstuvieron. Los causantes del desaguisado ante esa presión han echado marcha atrás, pero se les han visto las miserias. Posiblemente después del 20N vuelvan a intentarlo, pues es sabido que la estupidez política es siempre persistente.
La televisión pública demuestra el nivel de la democracia que existe en un país. Que los partidos y agentes sociales que se supone son elementos activos de esa democracia, quieran controlarla en base a censurar los contenidos de los informativos, no solo resta credibilidad al sistema, si no que pone, en materia de comunicación, a esa democracia a la altura de cualquiera de las democracias "bananeras".
Lo más estremecedor es que los que han que ser los garantes de la objetividad informativa, en aras de la defensa de los valores democráticos, como deberían ser los miembros del Consejo de RTVE, sean, o pretendan ser, los oscuros manipuladores de los hechos con el objetivo de alcanzar beneficios, cuando menos partidistas y de defensa de oscuros intereses ajenos a los ciudadanos.
Pero aún resultan más esclarecedoras las declaraciones de los partidos implicados en el asunto no criticando el hecho en sí, si no las formas y la inoportunidad del momento. Tampoco PP, ni PSOE, ni ERC, ni CCOO han exigido la dimisión, al menos por el momento, a ninguno de sus representantes en el Consejo de RTVE.
A todas éstas organizaciones se les verá la falta de vergüenza democrática mientras no lo hagan. Y lamento decir - y bien que lo siento- que en el caso de CCOO mucho más. Toxo, como Secretario General no puede mirar para otro lado como si nada hubiera pasado y menos en los tiempos que corren, a riesgo de cargarse uno de los pocos referentes de la izquierda que queda como es el sindicalismo confederal. A CCOO como organización, se le han otorgado en muchas ocasiones premios por su transparencia informativa. En ese sentido han dado un enorme paso atrás.
Toda esta "movida" la verdad es que ha sido una vergüenza. Menos mal que la presión social ha acabado derrumbado la propuesta. Pero bueno, el PP no se molesta en disimular que lo de la independencia de RTVE se acabó cuando ellos gobiernen. Para muestra un botón: ya han avisado que Ana Pastor puede ir haciendo las maletas porque, ¿qué es eso de tener a una buena periodista cuando podemos tener a un adulador de todo a cien?.
ResponderEliminarSaludos Replicantes.