Los niños de Rajoy

  

El próximo Presiente del Gobierno (pinchar aquí) quiere inculcar a los niños -futuros trabajadores se entiende- mayor respeto a los empresarios. Es de suponer que la "niña de Rajoy" quedaría al margen, puesto que dicho respeto ya lo lleva secuenciado en su código genético.

Para ello, cuando don Mariano llegue al poder -cuestión que se da ya por irremediable- modificará "ipso facto" la asignatura Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos, para formar a nuestros hijos en los (sic) "valores del respeto al emprendedor y al empresario". Parece ser, según el, que una de las consecuencias de tanto desempleo es que no existen dosis suficientes de respeto por parte de la masa trabajadora -se supone que también la parada- hacia la insigne figura del empresario-emprendedor español. Quizás lo que Rajoy persiga sea la recuperación del vasallaje o, por qué no, la vuelta a la esclavitud, donde lo importante no era cómo las personas se respetaban entre sí al margen de su condición, clase o estatus, si no lo realmente importaba era mantener la debida rectitud y consideración con el dueño y amo de tu propia vida: tu señor.

Si estamos en lo cierto y aunque Mintz y Elkins consideran que existe una relación recíproca entre capitalismo y esclavitud, a Mariano se le echarán sus amigos empresarios encima. La razón es muy sencilla: la esclavitud la abolieron los mismos patronos cuando cayeron en la cuenta de que tener esclavos y velar por ellos las 24 horas del día resultaba muy caro y fatigoso. Los esclavistas tenían que atender las enfermedades de su esclavos, los enterramientos, los partos, vigilar los intentos de fuga, atender virginidades, dar patadas en los culos, reprimir, neutralizar y amortiguar desobediencias y rebeldías, incluso a veces, se veían obligados a coger el látigo personalmente y dar público ejemplo al resto de la chusma esclava, con el consiguiente sobre esfuerzo que tan agotadora condición conlleva ¡Y no sabe Vd. don Mariano en casa era un horror!: que si Srta. Escarlata por aquí, que si Srta. Escarlata por allá....que pesadez! Además, como dice un amigo historiador, alguno dejó escrito que le "resultaba insoportable estar oyendo los cánticos de esclavitud todo el santo día” al lado de su palacio. Era , en definitiva, un sin vivir insoportable. Pónganse Vd. Sr. Rajoy, por un momento, en la piel de aquellos desdichados emprendedores-empresarios de antaño y lo comprenderá en seguida.

Por ello los esclavistas decidieron inventar algo mejor: formar y crear políticos tipo Rajoy y establecer  sistemas -como el fordismo, por ejemplo, en el que los esclavos se fueran a su casa , una vez terminado su trabajo y se las apañaran ellos solos. Se creó para ello un reparto de tiempo con el siguiente criterio: 8 horas para trabajar, 8 horas para consumir y ocho horas para dormir - con la excepción a la norma de que si por cualquier circunstancia el empresario necesitara de más horas de trabajo, éstas se detraerían de las horas de dormir y nunca de las de consumir, pues hay que venderles el  ”algodón” que producen.

Mucho cuidado pues con estos cambios don Mariano, no vaya a ser que los inventores del sistema se le echen encima por su extremado exceso de celo, que estos cambios tan radicales hacia el pasado no son nada buenos y los emprendedores-empresarios no están dispuestos a tanto sacrificio.

No obstante, y mientras nuestros hijos y nietos se forman según los criterios de “respeto marianero", podría establecer Vd. un módulo de enseñanza de obligada asistencia para políticos-manoseadores de pasta gansa, donde se les inyectaran los valores de la de la honradez y del respeto por lo público. En sus listas, por si se le ha olvidado, se presentaron unos cuantos imputados supuestos-manoseadores, que, para mayor desdicha, salieron elegidos.

Pero por ahí, según parece, nada que corregir.

MC

Les dejo nuestro el envoltorio musical para el evento con el gran Max Steiner, compositor de la banda sonora de  Lo que el viento se llevó