lunes, 1 de octubre de 2012

Mas, igual a más


 Como a  Artur Mas últimamente no se le hace mucho caso en su retranca dineraria, léase Pacto Fiscal, amenaza con fugarse de España envuelto en una "senyera". Pero descuiden, es solo para meter miedo al objeto de intentar que caiga algo y, sobre todo, para esconder su incompetencia en la gestión de la crisis desviando la atención y la exigencia de responsabilidades que como gobernante tiene al frente de su "gobern de los mejors". Nada mejor que echar mano del socorrido doctrinal nacionalista para distraer al personal y quitarse la espada que apuntaba directamente a su cabeza, como consecuencia de la nefasta gestión de la crisis llevada a cabo en su parte alícuota y catalana .

Y ahí estamos, dispuestos a debatir -es un decir- si son "galgos o podencos" en vez de centrar el debate en  las incontinencias  ultraliberales, recortadoras y empobrecedoras de Mas contra la población catalana. El President ha llevado a su terreno a todo el personal con la propuesta de que en la próxima legislatura Cataluña debe de ejercer su derecho a la autodeterminación. Pregunta: ¿en este proceso electoral que acabará el 25N se aclarará -por fin- el panorama sobre si los catalanes quieren o no separarse de España?, sinceramente creo que no, pues salga lo que salga de las urnas CIU seguirá moviéndose en una ambigüedad calculada. Ese panorama no se despejará hasta que no haya un referéndum claro y conciso donde se plantee la pregunta sin ambigüedades. Algo así como: "quiere usted que Cataluña sea un país independiente de España y por tanto un país soberano SI o No". Y lo más curioso es que ese referéndum no lo puede llevar a cabo la Generalitat.

Todo el mundo está de acuerdo en la inoportunidad del momento por la crisis económica. Los mercados son muy sensibles a estas cuestiones. Hoy mismo he oído a importantes empresarios catalanes manifestar su "honda preocupación" por el asunto, siempre se ha dicho que el dinero es cobarde. Sea como fuere el tinglado está montado, pues lo que empieza como una fantasía nacionalista para "ir tirando" en el mundo de la política, puede convertirse -aunque no se desee- en una realidad desbordante. Ayer Rubalcaba decía que Mas se daba "el piquito" con Rajoy, mientra azuzaba a las masas con la doctrina del independentismo. O lo que es lo mismo, el jefe de la oposición vino a decirnos que no pasa nada, que Mas festeja con los catalanes mientras les pone los cuernos con Rajoy. Con estas premisas veremos cómo acaba el asunto, pero lo más probable es que sigamos como hasta ahora: retranquear mucho, para que nada cambie.

Ya lo dijo Freud: "Cuando hay seres que encuentran en la realidad aquello mismo que más intensamente desean en su fantasía, huyen presurosamente de ello, entregándose con tanto mayor abandono a sus fantasías". El problema de Mas es que ya no tiene vuelta atrás. Si consigue el referéndum, cosa que dudo, puede encontrarse con la realidad. Si por el contrario no lo consigue, esa fantasía acabará con él. Mientras tanto seguiremos en lo de siempre: seguir amenazando con marcharse, pero sin terminar de hacer la maleta.

1 comentario:

  1. Creo que das en el clavo en todo lo que dices. Hoy hemos estado viendo a Mas en el programa "Salvados" y dice -exactamente- los mismo sinsentidos que Rajoy: que si hay que recortar porque no queda más remedio, que si lo del centimo sanitario son sólo unas perrillas que no le suponen esfuerzo a nadie... Cambias a uno por otro y el discurso es el mismo, lo que debería hacer pensar a la gente. Pero no, pones una banderita en las narices de los demás y el pensar se va a acabar. En fins...

    Saludos Replicantes.

    ResponderEliminar